El acceso a la financiación ha sido durante mucho tiempo uno de los mayores obstáculos para el crecimiento de las cooperativas. Durante el Congreso Cooperativo Mundial presentaron las novedades del Fondo de Impacto Global Cooperativo (Global Cooperative Impact Fund, GCI).
El Fondo GCI es una respuesta a la apremiante necesidad del movimiento cooperativo por atraer financiación para seguir creciendo o por acceder a préstamos. El objetivo de este nuevo fondo es dar respuesta a estas necesidades a través de la financiación para cubrir las necesidades a largo plazo y apoyar el desarrollo cooperativo.
El fondo, patrocinado por cooperativas para las cooperativas, fomentará la identidad y los valores cooperativos y se convertirá en un instrumento cooperativo esencial. «Queremos que el fondo sea fiel al ADN cooperativo en todo momento y en cada una de las etapas de su desarrollo y aplicación», explicó Bruno Dunkel, director de Inpulse Investment Manager, una empresa de base cooperativa especializada en la gestión de fondos de impacto que colabora con la ACI en el desarrollo del fondo GCI.
El objetivo del Fondo GCI es dar respuesta a todos los desafíos a los que se enfrentan las cooperativas y convertirse en una herramienta pragmática para alcanzar la visión de 2030 para las cooperativas. Con este Fondo, se ayudará a las cooperativas a superar sus dificultades financiando sus necesidades a largo plazo y, a su vez, se proporcionará asistencia técnica para garantizar la capacidad de gestión de las cooperativas. Propiciar la inversión en las cooperativas supone un éxito, tanto para el Fondo GCI, como para la sostenibilidad del sector, puesto que este instrumento funcionará como un impulso para que las cooperativas puedan acceder a otros prestamistas locales o internacionales.
El equipo ya ha desarrollado «un conjunto de documentos clave que representará la base sobre la que construir el Fondo». Entre estos documentos se incluyen estudios de países, términos de referencia del Fondo y estrategias de inversión.
El apoyo del movimiento cooperativo para el desarrollo de este instrumento con base cooperativa ha sido esencial. El trabajo preliminar incluyó cuatro talleres regionales en los que participaron alrededor de 20 organizaciones, para determinar las principales características que debía tener el Fondo y garantizar que se cubren las necesidades del movimiento.
Se están desarrollando distintas herramientas para medir el impacto del Fondo respecto a unos objetivos predeterminados, como los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU, con un especial interés en la reducción de las desigualdades de género y la lucha contra el cambio climático. «Creemos que las cooperativas pueden realizar aportaciones muy valiosas», indicó el Sr. Dunkel. Se elaborarán estudios de impacto social porque «es muy importante mostrar y dar a conocer el impacto que creamos, no solo a través del fondo, sino en todo el sector cooperativo».
El desarrollo del Fondo GCI cuenta con el apoyo del acuerdo marco de asociación entre la ACI y la Comisión Europea (#coops4dev). Esta asociación pretendía fortalecer el movimiento cooperativo y su capacidad de desarrollo internacional, a través de la creación de políticas, el desarrollo de conocimientos, la creación de redes de contactos y otras acciones para ampliar la visibilidad de las empresas del sector.
«El siguiente paso será conseguir un inversor principal y empezar a recaudar fondos. Varias instituciones internacionales y de desarrollo financiero han mostrado un gran interés por el Fondo. Necesitamos conseguir un inversor que funcione como base, como, por ejemplo, la Comisión Europea».
«Puede que necesitemos un año más para terminar de concretar todos los detalles», explicó. «Esperamos poder presentar las primeras inversiones del fondo en la próxima ocasión».