Pieter Fourie, 24, Fair Root Estate, Sudáfrica
La agricultura forma parte de mi vida desde que tengo uso de razón. Mi familia se dedicaba a la explotación vitícola y crecí en una granja, expuesto a todos los entresijos de la profesión. Un año después de empezar la universidad, decidí dejar mis estudios y dedicarme a la explotación familiar. Tuvimos la oportunidad de inscribir la granja en el sistema de comercio justo Fairtrade que nos permitía apoyar a la comunidad a través de incentivas cooperativas y aceptamos encantados.
Lutzville Vineyards, nuestra bodega local, tomó contacto también con el sistema Fairtrade para ayudarnos a conseguir todos los cambios. Parte de los beneficios de las ventas de productos con el sello Fairtrade se destinan a un fondo de primas propiedad de los empleados de las granjas que forman parte del sistema Fairtrade. El fondo se utiliza para mejorar la calidad de vida de los empleados y de la comunidad a través de proyectos de primas. Actualmente, en nuestra comunidad hay cientos de beneficiarios directos de este esfuerzo cooperativo y el número de beneficiarios aumenta constantemente.
El primer proyecto financiado por este fondo de primas que se hizo realidad este año fue una granja propiedad de sus beneficiarios. Esta granja, la Fair Root Estate, es la prueba material de lo que puede lograrse gracias al esfuerzo cooperativo y a las prácticas Fairtrade. Los beneficios que se obtengan en esta granja permitirán aumentar el fondo de la prima Fairtrade para seguir financiando proyectos para mejorar la comunidad.
En septiembre de 2021 ocupé el cargo de gerente de la Fair Root Estate. De este modo puedo participar más activamente en el modelo cooperativo para marcar la diferencia. También tuve la oportunidad de participar en la primera convención de la juventud de Fairtrade África, que se celebró en Kenia. Allí pude conocer a personas de todo el continente con ideas afines a las mías. Intercambiamos historias e ideas inspiradoras que me animaron a seguir implicándome en el sector cooperativo.
La identidad cooperativa está modificando el rumbo de nuestras comunidades, mejorando la vida de la clase obrera de manera democrática, ya que son ellos mismos quienes la controlan. Es una hazaña increíble, y solo es la primera de muchas, ya que seguirán ampliándose las oportunidades y los proyectos en el futuro.
Estoy orgulloso de formar parte de la identidad cooperativa. Creo que es necesaria para garantizar un buen nivel de vida para toda la comunidad en el futuro. A través del esfuerzo cooperativo podemos llegar muy lejos, todos los miembros de la sociedad juntos.