Eric Lee, 22, FUN company, Korea
Mi cooperativa, FunCompany, nació del trabajo realizado durante mis estudios de grado de cuatro años en la universidad Mondragon. Para poder finalizar mis estudios, debía participar en un equipo internacional y crear una cooperativa que funcionase. No había clases, ni profesores, ni exámenes. En lugar de ello, debíamos formar una cooperativa y aprender liderazgo, emprendimiento e innovación a través de experiencias reales.
Empezamos con 16 miembros de distintos países y trabajamos en muchos proyectos alrededor del mundo. Desde la venta callejera de comida en Shangai hasta la organización de un evento cultural coreano en Bilbao (España). Hemos llevado a cabo más de 100 proyectos en equipo.
Creo que en épocas difíciles es importante contar con la solidez de una cooperativa. Aunque los procesos de toma de decisiones más rápidos y eficientes pueden ayudar a las empresas a rendir mejor en el mercado, cuando se trata de gestionar situaciones como una crisis financiera, una pandemia mundial o el cambio climático, es importante disponer de habilidades colaborativas para la resolución de problemas para hacer frente a las incertidumbres.
Funcompany pudo seguir funcionando durante la pandemia de la COVID-19 gracias a la identidad cooperativa y a la confianza ciega en que podíamos crear un espacio seguro para todos. Además, encontramos nuevas oportunidades de negocio que nos permitieron cambiar nuestro enfoque para dar cabida a todo el mundo.
Mi experiencia cooperativa me ha cambiado la vida. Cuando hay un conflicto, me centro en entender la perspectiva de los demás y convierto el conflicto en la energía que necesito para mi propio crecimiento. Esto también me ayuda en mis relaciones personales con mi familia y mis amigos.
El crecimiento de las cooperativas coreanas empezó con un auge económico y social. Muchas cooperativas coreanas se enfrentan a dificultades económicas ya que se centran en los valores sociales y dejan de lado la competitividad del mercado. Sin embargo, según mi experiencia, las cooperativas pueden proporcionar un marco sólido basado sobre los valores sociales que puede servir como base para llevar a cabo operaciones sostenibles en el mundo capitalista.
Así es como quiero vivir, utilizando las cooperativas para solucionar los problemas que me rodean.