«Las cooperativas deben considerarse socios fundamentales a largo plazo; ayudan a construir comunidades más resilientes y fortalecen las economías locales». Así se expresó Guy Ryder, director general de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

El Sr. Ryder se dirigió a los asistentes al 33 Congreso Cooperativo Mundial y felicitó a la ACI por su 125 aniversario y su «completo historial de logros en la promoción de la justicia social, una causa que comparte con la OIT».

Las crisis actuales, como el cambio climático o la pandemia de la COVID-19 han «demostrado que las cooperativas tienen un papel esencial en la transformación para mejor de las comunidades, anteponiendo siempre las necesidades de las personas», indicó el Sr. Ryder y añadió que este papel estaba en línea con la función de la OIT.

No obstante, Guy Ryder quiso recalcar que no es algo nuevo, ya que la OIT ya reconoció a los cooperativistas como socios en el texto original de su constitución en el momento de su creación, en 1919. «A lo largo de la existencia de la OIT, las cooperativas han sido aliadas permanentes en nuestra misión por mejorar la justicia social y fomentar el trabajo digno», explicó. El primer director general de la OIT, Albert Thomas, era miembro del Comité Central de la ACI y, a día de hoy, la OIT sigue siendo el único organismo del sistema de las Naciones Unidas que dispone de un mandato explícito sobre las cooperativas.

El Sr. Ryder asumió el cargo de director general de la OIT en 2012, año en que se celebró el 32 Congreso de la ACI en Manchester (Reino Unido) y que coincide con el año que la ONU proclamó como Año Internacional de las Cooperativas. “Desde entonces, la colaboración bilateral entre la OIT y la ACI ha seguido creciendo a nivel mundial, regional, nacional y sectorial», dijo.

Además, añadió que las dos organizaciones se enfrentan a «grandes desafíos» en un futuro a la hora de abordar las necesidades laborales de la población.

«La pandemia nos ha hecho enfrentarnos cara a cara con la cruda realidad de las desigualdades, cada vez mayores, en nuestras sociedades, las inmensas vulnerabilidades e incluso la injusticia estructural que no hemos sabido evitar o reducir. El sufrimiento humano provocado por la pandemia es aún mayor debido a este fracaso general que no podemos sino reconocer», indicó. «Todo el mundo quiere y necesita una recuperación que conduzca a un futuro más justo, más resiliente, más sostenible y, en definitiva, mejor».

El Sr. Ryder reconoció que, históricamente, los valores de mutualismo, autoayuda y solidaridad han generado mayor interés y atención durante las épocas de crisis.

«Aunque no queremos que la acción cooperativa se considere simplemente un mecanismo para hacer frente a la crisis, esto es así por una buena razón: porque las cooperativas ofrecen respuesta a muchos de los desafíos urgentes e inmediatos a los que se enfrenta el mundo del trabajo», explicó.

«Lo hemos visto durante la pandemia; en todos los sectores y regiones, las cooperativas se pusieron manos a la obra para ayudar a sus miembros y comunidades. Por ello, deben ser reconocidas como los importantes actores económicos que son y deben poder beneficiarse de los incentivos y paquetes de recuperación que se están activando actualmente».

El Sr. Ryder considera que las cooperativas deben considerarse «socios fundamentales a largo plazo, ya que ayudan a construir comunidades más resilientes y a fortalecer las economías locales».

En la Conferencia Internacional del Trabajo de 2021, la OIT lanzó un llamamiento a la acción a todo el mundo para fomentar la adopción de políticas a favor de un trabajo digno para todos y que aborden las desigualdades. En este llamamiento, establece una agenda completa con medidas específicas para promover el empleo de calidad y el desarrollo económico, la protección de los trabajadores, la protección social universal y el diálogo social, y destaca la importancia de la economía social y solidaria, un sector en el que las cooperativas desempeñan un papel fundamental.

«El movimiento cooperativo es esencial para hacer realidad el compromiso del llamamiento mundial de la OIT, en colaboración con los gobiernos nacionales, con las empresas y con las organizaciones de trabajadores», explicó Ryder.

El año que viene se cumplirá el 20 aniversario de la adopción de la Recomendación 193 de la OIT sobre la promoción de las cooperativas, así como el 10 aniversario del Año Internacional de las Cooperativas. «En 2022 también se celebrará, por primera vez, una discusión general sobre la economía social y solidaria en el marco de nuestra Conferencia», dijo el Sr. Ryder.

«»Invito a todos los asistentes a dar los siguientes pasos por esta senda de la cooperación, ya centenaria, y a contribuir activamente con los preparativos de esta discusión general que tendrá lugar el próximo mes de junio. Será sin duda un momento histórico».